Efectivos policiales allanaron un sauna concurrido por la comunidad gay de la ciudad de El Alto, por una denuncia de presunta trata de personas. Producto de la requisa, cuatro personas fueron detenidas.

La información fue confirmada a Página Siete Digital por el responsable de incidencia política de la Coalición Boliviana de Colectivos Lgbti (Coalibol Lgbti), Beto Moscoso, quien además contó que las fuerzas del orden grabaron y tomaron fotografías a los clientes del establecimiento.

“La Policía hizo un allanamiento a un sauna gay de la ciudad de El Alto, han entrado con una supuesta denuncia de trata, pero no han encontrado ningún menor de edad, absolutamente nada. Obviamente, se encontraba ahí la gente, puros hombres gay, y lo que hicieron fue atropellar con improperios, los han filmado, han tomado fotografías”, denunció Moscoso a este medio.

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Como resultado del allanamiento, cuatro personas fueron detenidas, para las cuales Coalibol Lgbti pidió medidas sustitutivas, es decir, detención domiciliaria. El caso fue analizado también por la Defensoría del Pueblo.

Coalibol Lgbti publicó en su cuenta de Facebook un comunicado en el que repudian el accionar de las fuerzas del orden y consideran que el operativo llevado a cabo el 8 de mayo “raya en la discriminación y homofobia”.

“Consideramos que hubo un desmedido accionar de los efectivos policiales; por ello, consideramos que existieron en el operativo irregularidades varias que no sólo atentan contra la dignidad, privacidad y derechos humanos de los ahora aprehendidos, sino que además este desmedido operativo raya en la discriminación y homofobia, al tratarse de un lugar que atiende a personas gay, indica un pronunciamiento del colectivo.

Los detenidos fueron enviados preventivamente a prisión por cinco meses. Moscoso indicó que la imputación es infundada y “agarrada de los pelos”. Agregó que el caso fue analizado por instancias en derechos humanos y se llegó a la conclusión de que la demanda está “viciada de prejuicios, homofobia y subjetividades”.

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“Han arrestado a tres personas de los que estaban ahí (...), y a un vecino más. La imputación está agarrada de los pelos, porque no dice cuál es la pena ni quiénes son las víctimas; sólo dice (que se cometen los delitos de) pornografía y daños a la salud pública. Eso hemos analizado con la Defensoría y la denuncia está viciada de mucho prejuicio y homofobia, habla de muchas subjetividades, pero no hay una imputación por la que se pueda haber, no hay víctimas. Lo que hemos pedido es medidas sustitutivas, para aquellas personas ante el juez, pero no han sido aceptadas; les han dado detención preventiva durante cinco meses”, indicó.

El activista de Coalibol Lgbti reocrdó que casos similares a este ocurrieron en 1995, a finales de la década de los noventas e inicios de 2000.