La sauna suele estar presente en muchÃsimos gimnasios junto a los baños de vapor, ¿pero es también un método más para adelgazar? Existe un mito que asegura que pasar tiempo en una sauna nos hará eliminar grasa a través del sudor. A continuación te vamos a desvelar si esto es cierto o no.
Los baños de vapor a veces también se denominan «saunas húmedas», pero en realidad no son un tipo de sauna. Sauna es una palabra finlandesa que describe el alto nivel especÃfico de calor dentro de la habitación. Por otro lado, una sala de vapor está más relacionada con un baño turco por su alto nivel de humedad.
La sauna es una costumbre de hace miles de años y que numerosas culturas han ido adoptando tras conocer los beneficios que aporta. En este caso nos referimos a la sauna seca, muy diferente a los baños turcos o de vapor. Seguro que alguna vez has probado a meterte en esta habitación con elevada temperatura para saber qué se sentÃa.
Muchos aseguran que pasar tiempo dentro de ella te hace perder grasa y adelgazar de forma rápida. Bien, tenemos que decir que esto es mentira. La sauna no te hará perder grasa, sino lÃquido. Es cierto que si te pesas al salir de una sesión, notarás una bajada de peso debido a la sudoración; pero en cuanto retomes tu hidratación, ese peso volverá.
En otras ocasiones te hemos comentado que la pérdida de grasa solo se produce con una dieta o alimentación saludable y con la práctica de ejercicio. El problema es que queremos adelgazar sentados en una habitación a 70º y eso, sintiéndolo mucho, lo que hace es perder tu tiempo. Para adelgazar tenemos que perder grasa y en la sauna solo perderemos toxinas con el sudor.
Es importante que tengas en cuenta que no todo el mundo puede aguantar una sesión a esa temperatura. Si te encuentras mareado o con ansiedad, sal porque esa no es su función. Además tenemos que tener en cuenta que no podemos usarla más de dos veces al dÃa ni más de tres veces a la semana.
Para conocer cuántas calorÃas estamos quemando tendremos que estimar las que quemamos estando sentados. Por ejemplo, un hombre saludable de 83 kilos quema 42 calorÃas en 30 minutos sentado. Para encontrar el número que quema este mismo individuo mientras está sentado en un sauna, multiplicaremos esas calorÃas por 1.5 y 2 para obtener una estimación. En este caso, el individuo quemarÃa aproximadamente de 63 a 84 calorÃas. Es una gran diferencia de la estimación de 300 a 1000 calorÃas.
Si realmente queremos aprovechar los beneficios de estas salas de calor para reducir la retención de lÃquidos, existen algunos consejos a tener en cuenta.
Dependiendo de cómo se caliente realmente la sala, hay varios tipos de sauna:
La sudoración en general es la manera del cuerpo de mantener una temperatura corporal óptima enfriándolo en condiciones de calor, reaccionar al estrés y al ejercicio y deshacernos de las toxinas acumuladas en el cuerpo.
Cuando estamos tratando de perder peso, estamos trabajando para reducir la inflamación del cuerpo y deshacernos de las toxinas de la manera más natural posible. Las condiciones de aire caliente en la sauna harán que su cuerpo sude y, por lo tanto, ayudarán a eliminar las toxinas.
Aunque deberÃamos poder desintoxicarnos solos todos los dÃas, es realmente difÃcil hacerlo sin un pequeño empujón. Las sesiones de sauna pueden ayudar. Cuando se reduce la inflamación, el cuerpo puede funcionar mejor, más rápido, más fuerte y, en general, más saludable.
Siempre nos aseguraremos de no pasar muchos tiempo en la sauna. Incluso si disfrutamos regularmente de estas sesiones de sudoración de cuidado personal, no se recomienda nada más de 20 minutos, ya que corremos el riesgo de deshidratarnos.
Si, por otro lado, nunca antes ha usado una sauna o estamos comenzando, siempre es mejor comenzar poco a poco y evitar usarla durante más de 5 a 10 minutos a la vez. Además, si hemos hecho ejercicio con anterioridad, esperaremos al menos 10-15 minutos antes de entrar a la habitación caliente. No sabe cómo responderá el cuerpo al calor y es posible que nos deshidratemos mucho antes de lo que creemos, lo que puede causar estragos en el cuerpo.
La pérdida de peso inicial será principalmente agua retenida, por lo que puede ser tentador disfrutar de sesiones más largas. Aquà es donde la mayorÃa de la gente se equivoca. Lo haremos simple y evitaremos la deshidratación permaneciendo menos de 20 minutos por sesión.
Que no nos haga perder grasa no significa que no aporte beneficios a nuestro cuerpo y mente. Su efecto desestresante y relajante, libera endorfinas y nos ayuda a combatir el insomnio. Además como hemos dicho anteriormente, la sudoración elimina toxinas, nos hace tener una piel más limpia y nos ayuda a aumentar las defensas.
Buscando la relación con nuestro entrenamiento, una sesión de sauna de unos 20-30 minutos puede aumentar la elasticidad de tus músculos y mejorar tu función cardiovascular. La frecuencia cardÃaca puede aumentar a 100-150 latidos por minuto mientras usa una sauna, por lo que puede derivar en algunos beneficios para la salud:
La sauna no está hecha para todo el mundo. El calor extremo hace que tu cuerpo sude, y cuando sudas, pierdes lÃquidos. Si pierdes más lÃquido de lo habitual, puedes llegar a deshidratarte. Según la Escuela de Medicina de Harvard, una persona pierde alrededor de medio litro de lÃquido durante un corto perÃodo de tiempo en la sauna. Sin embargo, si bebes suficiente agua antes, durante y después, se reemplazarán fácilmente los lÃquidos perdidos por la sudoración.
La deshidratación severa es una emergencia. Es importante prestar atención a tu cuerpo y beber muchos lÃquidos si practicas sesiones en una sauna. Ten en cuenta estos signos de deshidratación de leve a moderada:
Los adultos mayores y las personas con afecciones crónicas como diabetes, enfermedad renal e insuficiencia cardÃaca, o las que están embarazadas, tienen un mayor riesgo de deshidratación.
Los altos niveles de calor que se experimentan en una sauna hacen que los vasos sanguÃneos se abran y se acerquen a la superficie de la piel. Cuando los vasos sanguÃneos se expanden, la circulación mejora y la presión arterial disminuye.
Algunos estudios han encontrado vÃnculos entre el uso de la sauna y una mejor salud cardÃaca. Sin embargo, a las personas que tienen problemas cardÃacos, como latidos cardÃacos irregulares o un ataque cardÃaco reciente, normalmente se les dice que eviten las saunas.
Las personas con presión arterial alta pueden usarlas, aunque los expertos advierten contra el cambio entre temperaturas extremadamente altas y bajas porque puede elevar la presión arterial. Además, quienes toman medicamentos para el corazón deben primero consultar con su médico.
Normalmente suele haber un panel explicativo sobre cómo realizar una sesión de sauna, aunque de todas formas nosotros te vamos a aconsejar cómo podrÃas realizarla:
Algo que debemos destacar es evitar el consumo de alcohol. Sabemos que esta sustancia aumenta al deshidratación, hipotensión, arritmia y muerte súbita cuando se entra en una sauna o baños de vapor.
Si nunca antes hemos usado un sauna, los expertos en saunas aseguran que se debe comenzar de a poco. Aunque algunos usuarios experimentados pueden convertir la sauna en un evento social más prolongado, no debemos excedernos. Cuanto más tiempo permanezcamos en la sauna, mayor será el riesgo de deshidratación, por lo que una regla general es limitar el tiempo a 15 a 20 minutos.
Pero para tener unas pautas generales, los tiempos recomendados son:
Una de las cosas más importantes que debemos recordar al usar una sauna o un baño de vapor es tomarlo con calma. Aunque las saunas normalmente se consideran seguras y ofrecen posibles beneficios para la salud, es importante prevenir la deshidratación. Es importante saber cómo te sientes y cómo responde el cuerpo al calor puede ser diferente cada vez.
No se recomienda usar una sauna para provocar la pérdida de peso, que será principalmente pérdida de agua. Se recomienda beber agua antes y después de usar una sauna. Si estamos preocupados, se aconseja hablar con un médico antes de meternos en este tipo de lugares.